¿Qué nos revela el color de nuestras heces?

Exactus Laboratorios Clínicos
21 ago 2024
2 Min. de lectura

Las heces pueden parecer un tema incómodo de discutir, pero en realidad, el color de nuestras deposiciones puede ofrecer valiosa información sobre nuestra salud. Cambios en el color de las heces pueden ser un indicio de diversos problemas, desde algo tan simple como la dieta, hasta condiciones más serias que podrían requerir atención médica. En este blog, exploraremos lo que el color de las heces puede decirnos sobre nuestra salud y cuándo deberíamos preocuparnos.

En estas infografías te explicamos mejor la apariencia de las heces según el estado de tu salud:

Factores que afectan el color de las heces:

Dieta: Los alimentos que consumes pueden afectar el color de tus heces. Los alimentos ricos en colorantes artificiales, como dulces y bebidas, pueden cambiar temporalmente el color de las heces.
Suplementos y Medicamentos: Algunos medicamentos y suplementos, como los suplementos de hierro y el carbón activado, pueden oscurecer las heces, mientras que otros pueden cambiar su color a un tono más claro.
Condiciones Médicas: Trastornos digestivos, infecciones y enfermedades hepáticas pueden influir en el color de las heces. La persistencia de un color inusual puede ser un indicio de un problema de salud subyacente que requiere diagnóstico y tratamiento.

¿Cuándo buscar atención médica?

Es importante prestar atención a los cambios en el color de las heces, especialmente si están acompañados de otros síntomas como dolor abdominal, sangrado, pérdida de peso inexplicada o cambios en los hábitos intestinales. Consultar a un profesional de la salud para una evaluación completa puede ayudar a identificar cualquier problema subyacente y recibir el tratamiento adecuado.

Conclusión

El color de las heces es un indicador importante de nuestra salud digestiva y general. Aunque muchos cambios en el color pueden ser benignos y temporales, es esencial estar atentos a cualquier cambio persistente o acompañado de otros síntomas. Mantener una dieta equilibrada, estar consciente de los efectos de los medicamentos y realizar chequeos médicos regulares pueden ayudar a mantener nuestra salud digestiva en óptimas condiciones.